El diario El Mundo alertaba el pasado mes en un artículo sobre el aumento del Anisakis, parásito que infecta el pescado y volvia a dar la voz de alarma al conocerse los resultados de un estudio llevado a cabo por el laboratorio de Parasitología de Farmacia de la Universidad de Santiago.
En el estudio se vio un aumento de las infecciones por anisakis en especies de peces mamíferos marinos por este parásito. Esto concuerda también con el aumento de casos de alergias a anisakis, detectados en los hospitales madrileños.
Se culpa al calentamiento global, también a las prácticas de los pesqueros que echan al mar las vísceras para evitar que se infecte el pescado, infectando por otro lado, los caladeros con las larvas.
Aunque el estudio se hizo con bacaladillas, el anisakis anida en otras muchas especies, como la sardina, el bacalao, el boquerón, el arenque, el salmón, el abadejo, la merluza, la pescadilla, la caballa, el bonito, el jurel o el rape, por lo que se pide congelarlo previamente o cocinarlo a altas temperaturas.
En los seres humanos no llegan a reproducirse en el estómago, por lo que sus efectos comunes son urticaria, dolor de estómago u obstrucción intestinal en los casos mas grave. Lo mas normal, según los expertos, es que el parásito se muera solo en pocas semanas pero el afectado pueda aumentar su sensibilidad ante futuras infecciones.
Medidas a adoptar:
-Evitar comer pescado crudo
– Lavar el pescado nada mas llegar a casa y quitar las vísceras
– Congelar a -20º durante un día al menos.
– Cocinar a mas de 60º durante 10 minutos al menos
– Condimentar o cocinar con tomillo, orégano y/o limón que son estupendos larvicidas (al menos lo han demostrado, a nivel experimental,).
Fuente: El Mundo: miércoles 16 de mayo 2012
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