Correr mejora tu cuerpo y tu cerebro: Como comenzar!

Hace unos meses comencé a correr desde cero para mejorar mi forma física. No fue fácil, ya que el deporte al que estaba acostumbrada tenia que ver más con caminar, estirar, algo de bici, etc., y la resistencia de la carrera tuve que ganarla con entrenamiento progresivo. Aún estoy en el reto y es algo que me pone a prueba cada semana.

Los beneficios de salud que he observado con la práctica del “running”, han sido muchos. Desde una mayor resistencia para afrontar el día a día, la pérdida de peso, una bajada del estrés, mejor calidad en mis horas de sueño y percepción de un aumento de mi  bienestar general.
Y es que cada vez son mayores las evidencias de que correr es bueno no solo para el cuerpo, sino también para la mente. Según un estudio realizado en Cambridge en ratones, la carrera y otros ejercicios aeróbicos potencian el crecimiento de nuevas células en el cerebro (un proceso llamado neurogénesis), potenciando la memoria y el aprendizaje. Al parecer este efecto se produce a través de una mejora del flujo sanguíneo en el cerebro y una regulación hormonal extra generada durante la carrera.

Comenzar a correr puede asustar al principio, dado que puede parecer muy duro, pero la clave está en planificar un entrenamiento suave y progresivo en días alternos e ir aumentándolo progresivamente.
Lo ideal es poder afianzar el hábito y convertirlo en una rutina diaria, integrarla en nuestra vida. Para ello necesitarás:

– Motivación

Puede ser mejorar tu resistencia, bajar de peso, aumentar tu energía, afianzar la relación con un amigo, correr una determinada carrera, etc. Lo importante es encontrar el motivo que te anime a entrenar.
– Equipo
Lo más importante son unas buenas zapatillas de deporte (mejor de carrera), camiseta, pantalón y chubasquero fino para los días de lluvia. El resto (pulsómetro, ropa técnica, etc. puede esperar). Correr es una de las actividades más baratas que puedes  realizar para estar en forma y se pueden encontrar equipamientos muy buenos y económicos en tiendas especializadas.
– Comienzo progresivo
Es mejor comenzar de forma muy progresiva y ver como tu cuerpo va respondiendo. Hay que ir alternando entre andar y correr para ir cogiendo fondo. Antes de comenzar es fundamental calentar con saltos y estiramientos suaves  y ¡siempre! hay que estirar unos diez minutos al final. Así evitaremos los dolores y malestares que nos hagan abandonar antes de tiempo.
– Rutina
Márcate una hora fija para entrenar 3 días alternos a la semana, no más de 4. Procura correr a un ritmo cómodo en el que puedas respirar bien si ves que te falta el aire puedes caminar unos segundos y recuperarte.
  
– Diseña un plan y síguelo
En Internet hay planes semanales de foros especializados para comenzar a correr que te guían haciéndolo más sencillo de lograr. 
– Marcarte tiempos no distancias.
Lo ideal es comenzar a coger resistencia hasta llegar a carreras de 20 o 40 minutos en función de cómo vayas progresando, e ir disfrutando de sentirte bien porque estás creando una rutina saludable, que es placentera para ti.
Es importante tener en cuenta factores como la capacidad física, tu edad, tu peso y alimentación pre y post-carrera.  También se debe controlar la frecuencia cardíaca sobre todo al principio.
Correr puede enganchar y ser divertido. Puedes comenzar participando en carreras urbanas o solidarias y aumentar así tu motivación. ¿Te animas?

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